jueves, 14 de febrero de 2013

HOY VA DE HUEVOS....

Si queréis saber cómo hacer una tortilla, continuad mirando este post, porque me ha salido una tortilla de muerte. Resulta que esta tarde me he acercado a la frutería para comprar huevos, tienen unos huevos XXL que son grandiosos, del agricultor, de los buenos y ricos de verdad. Los necesitaba para darles la cena a las niñas y he aprovechado para pedirle unas cajas que necesitaba para el cumple de la peque. Con mis cajas y mi docena de huevos, voy para el coche y los dejo en el asiento del acompañante. Hasta mi casa hay unos 500 metros. Iba al volante con mi música, cuando el coche de delante me ha marcado con el intermitente que iba para la izquierda, empieza a abrirse para la izquierda, y zas!!!!...frenazo, y que se mete a aparcar en un sitio que había a la derecha. Por cierto, para aquellos que ya estáis adelantándoos a los hechos, era del género masculino.

Podéis imaginar mi cara cuando el coche ha pegado el frenazo, los huevos han salido volando, junto con las cajas y he oído chaf!!chaf!! (si no es correcta la onomatopeya, no sé, es como ha sonado). Pero el desastre no ha acabado en  una simple tortilla, sino que en el aturullamiento del susto, se me ha ocurrido subir las cajas con los huevos de nuevo al asiento. De verdad, de verdad de la buena, no se os ocurra nunca jamás hacer lo que yo he hecho, porque los huevos, lenta y sigilosamente, se han ido escurriendo por entre las rendijas de las cajas, han pasado al asiento, se han deslizado por la tapicería, hasta llegar a las costuras......y después de gastar medio paquete de toallitas (por cierto, GRACIAS, al que las invento), entre asiento, alfombrilla y no me preguntéis como también cambio de marchas, acabe con la catástrofe.

Cuando estaba todo el coche limpio, cajas en mano con los residuos, mochilas del cole de las niñas, abrigo, el bolso y caray!! las llaves, ¿dónde están? Meto mano en el bolso, que para un lado, que para el otro, y finalmente: las llaves!! Cierro, voy para el ascensor y entonces me doy cuenta que ha quedado la luz del coche encendida (no ando muy bien de batería y no he querido arriesgarme), por lo que vuelta a empezar con el bolso, DIOS, como me puede pasar esto. Finalmente las encontré y huí del garaje, poniendo pies en polvorosa entre el coche y yo. 

Media hora mas tarde tuve que volver a bajar porque me había dejado parte de lo que necesitaba. Las niñas pudieron comer tortilla, sólo se rompieron dos huevos, pero ensuciaron tanto como si hubiera sido toda una docena. 

En este caso, os omitiré las fotos. 

Saludos, 
Mireia

4 comentarios:

  1. !!!! Manda " guevos" !!!! como decia aquel politico. El comentario podria llevar por titulo "Como cambiar de humor en 60 segundos" .

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    1. Las mujeres cuando os sois madres, os transformáis en superwonen

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    2. Pues veréis, aunque inicialmente se me puso cara de susto, mas que de enfado, (aunque el desastre fue grande, pense que aún era mayor, llevaba una docena, imaginad que se rompen los doce y no 2 o 3 huevos) mientras limpiaba me imaginaba como seria escribir este post y la verdad es que no podía parar de sonreír.

      Gracias por los comentarios.

      Siempre en las nubes.


















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